Tras el apartamiento de Sebastián Henríquez de su cargo al frente del sute, desde la Intersindical de Mujeres destacaron la celeridad con la que actúo el gremio.
Henríquez fue separado de su cargo de forma preventiva por el secretariado ejecutivo del sindicato que se puso al frente del mismo y convocó a la junta de disciplina para analizar las denuncias públicas y penales que recaigan sobre él.
Las mujeres sindicalizadas organizadas apoyaron la acción del gremio a la vez que advirtieron que la denuncia de violencia hecha a Henríquez no es un caso aislado y que se replica, con nulas respuestas, en todo el arco sindical.
A través de un comunicado, la Intersindical expuso que "visibilizar las violencias nos permite alertar a otras para que ninguna más pase por esto”.
“Este no es un hecho aislado sino que por el contrario el movimiento sindical en Mendoza tiene situaciones de denuncias por violencia laboral, política y de género en su mayoría", remarcaron.
Así lo explicó la referente gremial de la CTA y de la Intersindical de Mujeres, Cristina Rasso lo expuso en la radio pública.
