Los equipos más chicos de Capital y GBA arrastran deudas (porque la saldaron en la AFA, pero le deben a otros), entonces se les hizo cuesta arriba incorporar. All Boys, Nueva Chicago y Ferro, por nombrar a tres, no pudieron formar grandes planteles. No sería de extrañar que les vaya mejor a los chicos bien administrados como Flandria o Villa Dálmine que a los grandes de la categoría que nombré.
Lo bueno del campeonato es que tiene un octogonal que el anterior no tuvo. Del segundo al noveno van por el segundo ascenso (ahi, en el mano a mano, puede ganar cualquiera, puede haber sorpresas) y con seis descensos va a estar más entretenido que en campeonato pasado, con cosas por las que jugar hasta las últimas jornadas.
El tema de los viajes de uno y otro equipo también trajo cola como en la Primera División. Hay mucha disparidad. Eso debe solucionarse para la Temporada 2018/19. A Quilmes lo “mataron”. Tiene que viajar a Jujuy, Tucumán, Santiago del Estero y a Puerto Madryn. Solamente en 4 fechas debe recorrer 5.100 kilómetros. En todo el torneo, el “Cervecero” recorrerá 7.800 kilómetros, contra los apenas 2.700 que deberá hacer Deportivo Morón, por ejemplo.
Por último, en cuanto a la televisación, se verán cuatro partidos por fecha (3 de ellos por TyC Sports y el restante por DirecTV) lo que le dará a la B Nacional mayor difusión a un torneo que, considero, será muy interesante de seguir.
