El traspaso de poder del 1 de marzo, entre el Frente Amplio y el Partido Blanco, está atravesado por la inversión de Finlandia en la nueva planta de pasta de celulosa en Uruguay.
Los 2 temas en debate son un proyecto de reforma constitucional para anular contrato con UPM que es acompañado por varios extractos sociales.
Al respecto se propone que la ciudadanía vote para revalidar ese acuerdo anunciado en 2019, al inicio de la campaña electoral.
A su vez, discuten si el país cederá soberanía sobre el uso de un tren de cargas que estará casi exclusivamente destinado a UPM, pero cuya inversión pagará el Estado Oriental.
