La falta de funcionamiento que ha tenido Boca, en este último tiempo, lo dejó afuera de la Copa Libertadores de América, relegado en el último certamen, con escaso protagonismo en el actual y con la obligación de recomponer la imagen, en el encuentro frente a River, del miércoles por la Copa Argentina.
El empate sin goles frente a Talleres dejó algunas conclusiones: la figura de Agustín Rossi en el arco, el debut de Juan Ramírez, la falta de funcionamiento del equipo, la escasez de gol, el mal momento de Pavón, entre otras cosas.
Varias preguntas se hace el hincha de Boca en general, y hoy por hoy no tienen respuesta:
¿Por qué los futbolistas se quieren ir del club?
¿Por qué no juega Varela de titular?
¿Por qué no hace goles?
¿Quiénes son los laterales titulares?
¿Qué pasa con los colombianos?
¿Por qué no vino un 9?
¿Por qué no fue Riquelme a Brasil?
¿Por qué Cascini sigue en el club?
¿Por qué Ameal le dio tanto poder a Riquelme?
El miércoles Boca y River jugarán el cuarto clásico del año. Demasiados partidos para un calendario muy mal armado por Afa.
Y ya saben cómo es la historia. El que gane saldrá fortalecido y para el que pierda será una herida profunda desde lo deportivo.
