NASA MENDOZA

Un argentino es parte del equipo que llevó un vehículo de exploración a Marte

El consultor de los sistemas de orientación, navegación y control de las misiones a Marte de la NASA, es un ingeniero argentino, experto en el desarrollo del sistema de control y descenso en Marte.

En diálogo con LV4 Nacional San Rafael, Miguel San Martín habló de los objetivos que se han propuesto lograr con Perseverance, el programa que permitió llegar a Marte con un vehículo que tomará muestras y buscará rastros de vida en suelo de ese lejano planeta, proyecto en el que se trabajó denodadamente durante los últimos 8 años y que ha demandado un presupuesto de 2.500 millones de dólares.

“Hace 3.500 a 4.000 millones de años Marte era un planeta cálido y húmedo, con ríos, lagos, atmósfera y de acuerdo a lo determinado por vehículos anteriores, tenía todas las condiciones para tener vida. Perseverance va a buscar esas evidencias de vida y lo hace de dos formas –detalló San Martín. Una es llevando instrumentos científicos avanzados, que permiten buscar biofirmas, que consisten en evidencias indirectas, como por ejemplo determinar si un mineral que existe en una roca  es de origen biológico. Lo hará también tomando muestras y encapsulándolas, para traerlas a la tierra en pocos años, con otra misión. Teniendo las muestras de suelo y rocas de Marte, los podremos examinar en la Tierra con elementos sofisticados, buscando fósiles de vida, siempre a nivel de microbios”.

El científico explicó que existe una teoría que sostiene que hace millones de años Marte tenía un núcleo líquido, igual al de la tierra, que al girar, en lo que se llama efecto dínamo, generaba un campo magnético que protegía la vida y la atmósfera de la radiación solar. Cuando ese líquido se enfrió, perdió ese campo magnético (similar proceso sufrirá en el futuro nuestro planeta), y debido al impacto de los vientos y las partículas solares, esa atmósfera desapareció, por lo tanto el lugar quedó frío y seco.

San Martín mencionó que no existe evidencia de que haya existido vida avanzada o inteligente en Marte, aunque no descartó la posibilidad de que haya civilizaciones avanzadas en algún otro lugar del universo.

“Es difícil pensar que entre los millones de galaxias y planetas el fenómenos de la vida inteligente no se diera en otro lugar. Sería raro que fuéramos tan únicos” puntualizó.

El científico aseguró que ya se piensa en la posibilidad de viajes tripulados a Marte, haciendo pie primero en la Luna, donde se postula vivir, aprendiendo de su suelo. El gobierno de Estados Unidos, durante la gestión de Donald Trump había decidido hacerlo en el año 2024 y la actual gestión sostiene que mantendrán ese objetivo vigente, aunque tal vez en un plazo más extenso.