Los diputados provinciales aceptaron el pedido de disculpas del representante del Pro Andrés Suriani y le perdonaron el apercibimiento por sus declaraciones ante el portal La Gaceta Salta cuando aseguró que el feminicidio y la homofobia "son un invento" y que "la ideología de género es un flagelo" al que comparó con lo ocurrido años anteriores con el sida.
Con la excepción de la diputada Gladys Moisés, el proyecto que finalmente no se aprobó contaba con el aval de todas las diputadas de la Comisión de la Mujer y planteaba una sanción para el legislador cuestionado al evaluar que sus dichos se oponen a los derechos contenidos en leyes como la de Educación Sexual Integral y la de Identidad de Género.
A continuación compartimos algunas de las intervenciones durante la sesión de ese martes, comenzando con la lectura del proyecto de repudio por parte del presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Godoy, y la posterior intervención de Suriani, en la que aclara que no se arrepiente de condenar la ideología de género porque "viene a plantear un problema de identidad en los niños" y "desarraiga el sexo se la naturaleza humana y lo explica a través de la cultura". "Hablemos del idioma (...) hablan de persona gestante, cuando la mujer salteña habla de maternidad (...) y aspira a llenar esta tierra de hijos. Las madres aspiran a que sus hijas conozcan a un buen marido", aseguró.
La diputada Silvia Varg (Un cambio para Salta) dijo que las expresiones de Suriani son propias del fanatismo, lo cual es inconcebible en un legislador dado que sus declaraciones vulneran derechos contemplados en la legislación nacional y en los tratados internacionales:
Por su parte, el diputado Claudio del Pla aseguró que para el diputado cuestionado la homosexualidad es una enfermedad y que con sus dichos también demuestran que forma parte de quienes pretenden conservar la opresión de la mujer:
Guillermo Martinelli (Un cambio para Salta) también condenó las expresiones de Suriani y dijo que no puede negar la existencia de la ley y del espíritu de la misma. "Eso se lo podemos permitir a cualquier ciudadano, pero no a un diputado", explicó y agregó que los derechos de las mujeres fueron construyéndose a lo largo de la historia por lo que no existe la tal "cultura natural" que continúa defendiendo Suriani sin visos de arrepentimiento.
Finalmente, Suriani se disculpó ante sus pares porque aseguró que sus dichos fueron mal intepretados, dado que no quiso negar la violencia contra las mujeres ni discriminar a las personas homosexuales.
