La mayor parte de los suelos de Entre Ríos generalmente son “suelos pobres en fósforo” con poca disponibilidad para las plantas, señaló el ingeniero agrónomo Pedro Barbagelatta. Suelos que originalmente eran pobres ahora son más pobres aún. Y los que en principio tenían muchos nutrientes con las siembras van perdiendo fósforo. Por eso, lo ideal es hacer un muestreo de suelo previo a la siembra, con la ayuda de un profesional y ahí se verá en laboratorio el nivel de fertilidad, para luego establecer qué fertilizante usar, explicó el especialista.
