Por Daniel Corujo
Se acabó la participación de Diego Schwartzman en el abierto de Estados Unidos al caer en octavos de final ante la gran sorpresa del torneo, el neerlandés Botic Van de Zandschulp, 117 del mundo, por 6-3, 6-4, 5-7, 5-7 y 6-1 en 4 horas y 20 minutos de juego.
El europeo Van de Zandschulp demostró su tremendo momento tenístico. Su altísimo nivel de confianza y una actuación inusual para él en esta clase de torneos ya que el neerlandés habitualmente juega challemgers.
Mostró un servicio solido. Una gran defensa. Una derecha muy veloz. Y, en muchas ocasiones, también algo de suerte…
Si bien Schwartzman ganó el tercer y cuarto set (ambos 7-5), jamás pareció tener el partido bajo dominio total. Siempre dio la sensación que lo luchó más que jugarlo, ya que el rival nunca aflojó y en la red siempre ganó.
Entonces, el “Peque” apostó a puntos más largos, jugados desde la base y a jugar al menor error.
Tenso fue en el cuarto set las dos chances de match point que tuvo Van de Zandschulp (que jugó como un Top-30) que en ese momento jugó esos puntos de acuerdo a su ranking…117.
Cuando parecía que la experiencia de Schwartzman podía ser clave quinto y definitivo set, un mal segundo game del argentino con su saque lo puso 0-3 y de alli en más se desmoronó todo. De allí en más, la potencia del europeo fue demasiado para el “Peque”.
