31 DE MARZO ESPECIALES

Raúl Alfonsín, a ocho años de su muerte

A cinco días de haber asumido en 1983 como presidente elegido por el voto ciudadano, Raúl Alfonsín tomó decisiones que determinarían, de entrada, el rumbo de su gobierno, el inicio de un camino institucional para la República Argentina, o la RA, sigla coincidente con la del nombre del candidato, que había identificado la campaña radical estampada sobre los colores celeste y blanco.

La derogación de la ley de autoamnistía del régimen militar y los decretos que ordenaron el procesamiento judicial de las tres juntas militares y crearon la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep), en defensa de los derechos humanos, fueron la estructura basal.

Esa senda debía ser marcada y remarcada todas las veces necesarias, expresando la “voluntad del pueblo de forjar un destino propio”, contraria a la imposición por la fuerza, según él mismo recordó hasta cuando tuvo oportunidad, en una de sus últimas apariciones públicas registrada en el audio de este informe de Contenidos, Radio Nacional, que recorre momentos clave de la etapa para la consolidación democrática.

Alfonsín murió el 31 de marzo de 2009, fue despedido por multitudes durante el velatorio en el Congreso y la ceremonia en el cementerio de la Recoleta.