-Parece una tomada de pelo que no se diferencie o que no se pueda ver por qué se quiere cambiar el nombre. Tenemos instalados ciertos racismos sobre los que habría que reflexionar y trabajar.
La coordinadora del Colectivo de Estudios e Investigaciones Sociales (Ceiso), Natalia Boffa, habló en la Radio Pública sobre la propuesta del Municipio de cambiar el nombre al Parque Campaña del Desierto ubicado entre las calles entre Fortaleza Protectora Argentina, Cabrera, Charcas y Fragata Sarmiento de Bahía Blanca.
-La Campaña vino a reforzar una expansión que se venía dando en la Patagonia. Fue un proceso genocida, muy violento y debe ser recordado pero no homenajeado –agregó la docente y becaria del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas Docente (Conicet).
El Municipio puso a disposición un sitio en el que se puede votar de manera abierta el cambio de nombre, pero hasta el momento el más votado es el del General Julio Argentino Roca -mentor de la Campaña del Desierto entre 1878 y 1885- con lo cual no se cumpliría la idea de dejar de reivindicar ese proceso.
En las reglas para elegir el nombre se establece la “connotación negativa” de Campaña del Desierto y se deja en claro que no está permitida ninguna denominación contraria a los valores democráticos, a la paz y los derechos humanos o que signifiquen una reivindicación de hechos violentos o una ofensa a cualquier persona o grupo de personas.
-(Los votantes) O no leyeron las reglas o no entendieron por qué se quiere cambiar el nombre o naturalizan el hecho violento como fundacional de la ciudad. Se está legitimando la violencia estatal como necesaria, como que no existiría Bahía Blanca sin ese episodio.
Boffa dijo además que “le preguntaría al Municipio para qué quiere cambiar el nombre de Campaña del Desierto. Si es por no querer homenajear a un hecho violento y reivindicar a aquellos pueblos violentados, consultaría a las organizaciones que trabajan hace tiempo en esa reivindicación”.
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