Acompañado por su hijo Fernando tocó en el Aire de Aquí, antes de presentarse en el Torquato Tasso.
Mario comentó que la juventud de las provincias del norte le reclamó que haga un “chamamé urbano”, que represente a los chicos de la ciudad, al igual que se hace con la gente del campo y con los animales de la región.
Acepté el reto y ya “hice seis temas” que pronto van a integrar un disco, aseguró el músico, al tiempo que relató parte de una historia que le dio letra a alguno de esos nuevos temas.
Cuesto las cosas que ocurren en el pueblo, son temas vivenciales, aseguró Mario y consideró que por eso, “aunque estén mal escritas, algo de las letras te llega al corazón”.
Consultado por Marcelo sobre si ha escrito algún libro, dijo que su mujer lo está persiguiendo para hacerlo y recordó que lleva 57 años en los escenarios y por eso hay mucho para escribir.
Antonio Tarragó Ros formó parte de la charla y dijo que cuentan “cosa tan profundas y serias que hacen a la construcción de lo que somos” y habló de la generosidad de Mario.
Los días 7 y 8 de diciembre próximos, Bofill actuará en el Torquato Tasso, ubicado en Defensa 1575 de la ciudad de Buenos Aires.
