Respecto al mes previo, la actividad fabril marcó un leve retroceso de 0,8%.
Según el Índice de Producción Industrial (IPI) de FIEL, en abril cinco de diez sectores industriales relevados tuvieron una mejora en el cotejo interanual.
El mayor avance lo registró la producción de minerales no metálicos, encadenando un trimestre de mejora.
Aun cuando se encuentra presente el efecto de la caída de la producción - y las ventas- en los primeros meses de 2024, en algunos segmentos al interior de la rama el nivel de actividad de abril resultó el más elevado en un semestre.
El segundo mayor avance interanual lo registró el bloque de los químicos y plásticos, a causa del rebote de algunas actividades respecto a la caída de un año atrás junto con la vuelta a régimen en algunas plantas luego de las paradas técnicas que se realizaron en marzo.
Por su parte, la producción automotriz retomó en abril el sendero de mejora tras el impasse de marzo que había interrumpido un trimestre de avance.
Las exportaciones de vehículos volvieron a registrar un aumento explicado por el repunte de las ventas a Brasil, mientras que en el mercado local los envíos de las terminales a concesionarias y los patentamientos registraron un muy marcado aumento, con una participación creciente de unidades importadas.
En alimentos y bebidas, la producción volvió a crecer y sumó el décimo mes consecutivo con mejoras.
Entre los alimentos se destacó el avance de la lechería, mientras que la faena de vacunos volvió a crecer después de un trimestre en retroceso.
Una tendencia similar se verificó en la producción de gaseosas, jugos y aguas; al igual que en cervezas que tuvo un nuevo incremento luego de sucesivos recortes de producción desde fines de 2022.
En tanto, la mayor contracción sectorial se registró en abril en la producción de papel, cartón y pasta celulósica, rama que acumula más de un año en caída.

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