SECUNDARIO DE ADULTOS ENTRE RIOS

Hutt: "Lo que termina sucediendo es que las jóvenes abandonan"

El rector de la Escuela Secundaria de Adultos N°12, en Concepción del Uruguay, retomó la ley provincial de Educación de Entre Ríos y señaló que la normativa establece en su artículo 43 que "el Consejo General de Educación garantizará en escuelas secundarias de adultos el funcionamiento de jardines maternales con el propósito de asegurar la permanencia y egreso de los alumnos y alumnas”.

En esta línea, manifestó que “la responsabilidad es compartida por todo el gobierno provincial, en distintos niveles de decisión y de responsabilidades” y enumeró: “Un Gobernador que no toma la decisión de cumplir con la ley de Educación en un punto tan sensible para las pibas que son madres y no pudieron terminar su educación secundaria, el Poder Legislativo que no actúa para garantizar el presupuesto para la creación de los jardines, el Poder Judicial, que no actúa exigiendo que se cumpla ley y se respeten los derechos, que incluso han decidido en contra de amparos judiciales que hemos presentado para su creación, la Presidencia del CGE que no exige el presupuesto necesario para cumplir con su mandato, que no levanta la voz, que no hace visible este sufrimiento de las madres que quieren ejercer su derecho a la educación y no lo tienen garantizado y también incluyo a los organismos de defensa de los derechos de la mujer que no ponen este problema en agenda”.

Por otro lado, Hutt manifestó que “a pesar de todas las falencias del gobierno en cuanto a resolver el problema, muchas pibas pueden concurrir a estudiar en escuelas secundarias de adultos siendo madres”. “Ante el incumplimiento del Estado surgen actores de la comunidad educativa para sumar sus esfuerzos, vemos a una gran cantidad de docentes recibiendo niños en clases de adultos y muchas veces llevando actividades para esos niños además de las actividades para los adultos, ver una docente dando clases con un bebé a upa para que su madre pueda escribir es un hecho cotidiano en nuestras escuelas de jóvenes y adultos, ver al resto de los estudiantes ayudando en el cuidado o aceptando la presencia de niños en sus clases es parte de la identidad de las escuelas y la decisión de los y las Directivas de dichas escuelas haciéndose cargo del ingreso de menores, con todos los riesgos, sin seguros y colaborando en su cuidado, es una función no escrita en los roles de esos cargos, pero que tomamos la decisión personal de llevarla a cabo”, detalló al respecto.
Sin embargo, recordó que “la presencia de niños y niñas en escuelas de adultos no es lo correcto, pero es la respuesta de las comunidades educativas ante el incumplimiento del Estado entrerriano” y que “cuesta mucho decirles que no pueden traer a sus niños o niñas cuando llegan el primer día y nos cuentan que no tienen otra posibilidad de estudiar que no sea concurriendo con los chicos”.