Galtieri recibió a los tres periodistas británicos que fueron secuestrados, robados y después abandonados desnudos en las afueras de Buenos Aires. El Ministerio del Interior atribuyó estos hechos a "fuerzas espúreas de origen incierto".
Los cronistas de la cadena de televisión inglesa “Thames”, fueron secuestrados en las proximidades del palacio San Martín, sede del Ministerio de Relaciones Exteriores, muy cerca de donde el día anterior, lo levantaron al corresponsal norteamericano Christopher Jones. El taxista que trasladaba a los trabajadores de prensa británicos, fue liberado tras declarar que los asaltantes solo estaban interesados en el dinero y el equipo electrónico de los periodistas. Julián Manyon, Ted Adcock y Trevor Hunter horas después aparecieron desnudos en la localidad bonaerense de Pilar. El ministro del Interior, general Alfredo Saint-Jean, envió un coche a recoger a los periodistas ingleses y los invitó a cenar en la Casa del Gobierno, donde más tarde fueron recibidos por Galtieri.
Un comunicado oficial repudió estos hechos, que "parecen inspirados por fuerzas espúreas de origen incierto que, sin medir procedimientos, pretenden desdibujar una limpia imagen argentina ante el mundo, caracterizada desde el inicio mismo del conflicto por el más estricto respeto a la moral, al derecho y a la vida humana".
Uno de los secuestrados, Julián Manyon, dijo que en varias ocasiones pensó que su vida estaba en peligro y si bien declinó especular sobre la identidad de sus asaltantes, descartó totalmente que se tratase de ladrones comunes. "Si lo que buscaban era asustarnos, lo han conseguido", dijo Manyon.
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