El exgobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, murió este domingo por la noche, a los 65 años, en una clínica de la ciudad de Rosario afectado por un severo cuadro respiratorio derivado de coronavirus que lo mantuvo más de diez días conectado a un respirador. Lifschitz era el principal dirigente opositor de la provincia y permanecía internado en estado crítico desde el 19 de abril en el Sanatorio Parque de Rosario, poco después de confirmarse que había contraído Covid-19.
La periodista Gabriela Bruno de Radio Nacional Santa Fe, destacó su gran trayectoria política y enfatizó que tenía “una muy buena imagen política que lo posicionaba muy bien para una nueva candidatura”, dijo y subrayó que “es muy significativa” la cantidad de mensajes en redes sociales que todo el arco político dio para expresar su pesar por su muerte.
Sus colaboradores informaron que no habrá velatorio aunque sí se recibirán muestras de afecto en la Biblioteca Argentina Doctor Juan Álvarez de Rosario, mientras que el gobernador Omar Perotti decretó 48 horas de duelo.
El presidente Alberto Fernández manifestó su "enorme pesar" por el fallecimiento del exgobernador santafesino Miguel Lifschitz, a quien definió como un "hombre íntegro" que "puso todo su esfuerzo en favor del progreso" de su provincia.
