El contagio de más de un centenar de lobos marinos de un pelo con gripe aviar a partir del contacto con aves migratorias infectadas generó el alerta de autoridades y especialistas. El presidente de la Fundación Fauna Argentina admitió preocupación por lo que está sucediendo “por lo agresivo del virus y la rapidez con la que avanza” y pidió a la ciudadanía tomar ciertos recaudos.
Juan Lorenzani reconoció que se trata de “un tema preocupante” y ubicó el origen en Perú donde, en febrero, el virus de la gripe aviar “había mutado contagiado a gran cantidad de lobos marinos de un pelo provocando muchas bajas”.
“Se piensa que el virus bajó por el océano Pacífico, tocando distintas loberías de la zona de Chile hasta llegar a Tierra del Fuego que tuvo este mes los primeros caos y de ahí se fue a distintas provincias”, explicó.
A su vez, dio cuenta de la situación y las medidas adoptadas en Chubut y en Río Negro al tiempo que insistió en la velocidad con la que avanza este virus que, aclaró, "se contagia por contacto, no por el aire".
En ese sentido, advirtió que “es la primera vez que vemos algo así, en apenas 10 días murieron 60 lobos marinos en la zona de Mar del Plata y algo más en Necochea” y remarcó que “es una cepa muy agresiva que afecta casi inmediatamente a estos animales”.
Lorenzani hizo especial hincapié en que, dado que se trata de “un virus que pasó de aves a mamíferos marinos y está más cerca del humano y no se sabe si puede transmitirse, la recomendación es no acercarse, tomar distancia de 15-20 metros y evitar llevar mascotas a la playa”.
“Hay que tener cuidado y ser responsables, tomar las precauciones necesarias para evitar posibles consecuencias”, concluyó.
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