En 2005, Adolfo Scilingo fue condenado por crímenes de lesa humanidad

El 19 de abril de aquel año, la Audiencia Nacional de España condenó al represor argentino, ex capitán de corbeta, a penas que sumaron 640 años de prisión por delitos de lesa humanidad que incluyeron 30 muertes alevosas, torturas y detención ilegal.

Aquel fallo fue el primero dictado por la justicia española contra un imputado por crímenes contra la humanidad cometidos en el extranjero y por ciudadanos extranjeros, aunque hubo víctimas españolas.

La sentencia recogió en 209 folios un relato pormenorizado de los crímenes cometidos por los militares golpistas durante la dictadura argentina y se detuvo especialmente en los hechos -secuestros, asesinatos, torturas, desapariciones, apropiaciones de niños e incineraciones- ocurridos en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA).

Allí quedó narrada la intervención de Scilingo en los delitos que se le imputaron, incluida su participación en dos de los vuelos de la muerte, en los que fueron arrojadas al Atlántico 30 personas vivas, desde aviones de la Armada en vuelo.

El tribunal destacó que el represor argentino tuvo pleno conocimiento de lo que ocurría en la ESMA y explicó su participación en la reunión con 900 oficiales de la Armada, en el cine de Puerto Belgrano, donde el almirante Luis María Mendía expuso el plan para acabar con los subversivos.

En 2007, el Tribunal Supremo de España elevó la condena impuesta a Scilingo de 640 a 1084 años de prisión por considerarlo responsable de 30 asesinatos y una detención ilegal, además de ser cómplice de otros 255 secuestros, ocurridos durante su desempeño en la ESMA.

Para calcular la pena, los jueces sumaron 19 años de prisión por cada uno de los 30 homicidios, cuatro años por la detención ilegal y dos años por la complicidad en cada secuestro.

Al momento de la condena, Scilingo se encontraba detenido desde 1997 en Madrid, por decisión del juez Baltasar Garzón ante quien había admitido haber formado parte de, al menos, dos vuelos de la muerte entre junio y agosto de 1977.

El 18 de noviembre de 2019, luego de cumplir el 4 por ciento de su pena irrevocable, el represor que comandó los vuelos de la muerte fue beneficiado por un artículo del Reglamento Penitenciario local y derivado a un Centro de Inserción Social (CIS) de la capital española.

Hasta lograr la libertad condicional, Scilingo pasó 22 años, un mes y 10 días en la cárcel.

Recordamos esta fecha con registros sonoros conservados en el Archivo Histórico de Radio Nacional.