El reciente testimonio de Tomás Ghisoni, quien admitió haber denunciado falsamente a su padre por abuso sexual —acusación que derivó en tres años de prisión preventiva para el obstetra Pablo Ghisoni— pone en evidencia la necesidad de analizar cómo actúa la Justicia. De acuerdo con su relato, su mamá, Andrea Vázquez, lo “instruyó sobre qué decir y qué callar” en las instancias judiciales, creando una “verdad emocional” que, con el tiempo, reconoció como ajena a la realidad.

El abogado Mauricio D’Alessandro dialogó con el equipo de Creer o reventar y, tras señalar que la madre inventó situaciones de abuso y se las implantó a los menores, afirmó: "En la provincia de Buenos Aires la Justicia de Familia no sirve para nada, está podrida desde principio a fin".

Consultado sobre por qué fracasa la Justicia, explicó que "hay un montón de casos, pocos funcionarios, medios muy primitivos y muy poca capacidad para poder resolver rápidamente".