Fue un día histórico para Tucumán en otorgamientos de derechos, ya que el Concejo Deliberante capitalino aprobó la ordenanza de cupo trans, que establece una participación de al menos el 1% de personas trans en la planta de empleados del municipio, medida que lleva algo de tranquilidad al colectivo, que desde hace años sufre discriminación a la hora de buscar un trabajo. “Es muy importante porque nosotros somos muy castigadas por la sociedad, muchas veces. No tenemos oportunidades de trabajo. Salimos a la calle, golpeamos puertas y no tenemos oportunidades. Muchas veces somos discriminadas y lo único que nos queda es la prostitución. Para mí esto es muy bueno, es increíble lo que estoy viviendo porque fue el hecho de salir de una vida tan fea. Hace 35 años que milito, estuve en situación de calle. En los ’80 y los ’90 una persona trans era discriminada y muy mal vista. Es como que no tenemos derecho a la salud, a la vivienda y hay muchas chicas que sufren y viven en la calle. Ahora nos sentimos un poco más apoyadas por la sociedad”, dijo Gabriela, quien se encuentra trabajando junto al concejal José “Lucho” Argañaráz, como personal temporáneo del concejo.

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