Crisis hídrica: vecinos del norte exigen participar de la toma de decisiones

El pedido responde a los inconvenientes para el abastecimiento de agua potable que vienen sufriendo desde hace dos años en las localidades de Mosconi, Aguaray y Tartagal, donde residen 250 mil habitantes. El sistema hídrico Itiyuro se abastece del río Caraparí, que desciende desde territorio boliviano y enfrenta una merma en caudal, por lo que actualmente se está distribuyendo agua de red proveniente de la represa El Limón, que tiene cianobacterias y algas peligrosas para la salud humana.

Esta situación motivó la reunión del Comité de Emergencia Hídrica provincial que dispuso medidas: custodia policíal para resguardar camiones aguateros destinados a repartir agua potable a la población, además de agregar el máximo número posible de estos vehículos, y extremar el control sanitario de la población.

Uno de los asesores técnicos de la Asamblea de Lucha por el Agua de Tartagal (ALPAT) es Víctor Soruco, ingeniero químico e ingeniero en petróleo, quien dialogó con la Radio Pública sobre la situación:

Soruco señaló que las perforaciones de pozos de agua no se realizan con la celeridad que requiere la necesidad de población y que se ejecutan con de mala calidad. Explicó también los inconvenientes que surgen cuando se sobrexige la extracción del líquido o cuando los pozos se perforan demasiado cerca entre sí.

Por último, afirmó que los vecinos y vecinas de la asamblea ALPAT piden tener participación, a través de los técnicos que la confroman, para la toma de decisiones.