Pablo Follonier de la Fundación Puentes, contó que los orígenes del calefón solar se remontan a Brasil donde ingenieros idearon este tipo de artefactos. Se trata de un dispositivo que se realiza de manera comunitaria e íntegramente con materiales reciclables y se encuentra funcionando en una escuela de alfabetización del barrio San Martín, El Volcadero. Se utilizaron “latitas de cerveza, botellas de plástico grandes, cajas de teta brik y tachos”, explicó. Para esta oportunidad se compraron los caños de PVC como para que no haya pérdidas, y el mecanismo “logra calentar hasta los 70 grados”, indicó.
