CULTURA ENTRE RÍOS

Belén Zavallo: “A donde yo escribo es a donde estoy siendo madre”

La escritora paranaense Belén Zavallo es una de las ganadoras del Premio Storni con su libro “Lengua montaraz". “El premio es nacional, el jurado es muy significativo (Osvaldo Bossi, Estela Figueroa, Graciela Cross), la cantidad de obras que se presentaron fueron un montón (2200). Estoy muy agradecida”, contó Zavallo en comunicación con Radio Cuaderno, de Radio Nacional Gualeguaychú. Belén Zavallo es docente, da talleres de escritura y ha publicado el fanzine "Todos tenemos un jardín" (sello Camalote), participó de las antologías "Flotar" (Camalote), "Otras nosotras mismas" (Aguaviva), "El beso que te di" (Arroyo ediciones) y tiene publicados Dos poemas en la serie de Arroyo. También lleva adelante la librería Jacarandá.

Al compartir momentos del premiado "Lengua montaraz", Zavallo contó cómo fue su proceso de escritura. “El monte, el arroyo... me interpela ese paisaje. Me siento bien ahí. Salís y se cruza una liebre, te despierta una lechuza. Ese paisaje me recobra vivencias de mi infancia, yo crecí en Viale, cerca del monte. Y también está la mirada, quizás con extrañeza, de mi madre, que había vivido en Paraná y que de golpe se encontraba viviendo en una ciudad en la que faltaban tantas cosas, que ella ya había tenido. Yo recupero la lengua de la madre, la lengua que una tiene como referente, que es la que te va contando las cosas”, contó Zavallo. "Lengua montaraz" presenta una historia familiar.“La maternidad me toma el cuerpo, le dedico tiempo, le dono tiempo. Siempre se va a ver reflejado en lo que escriba. A donde yo escribo es a donde estoy siendo madre, además de escritora. El espacio de la escritura no lo pienso como algo que me separe de mis hijas, sino lo contrario”, dijo Zavallo en el aire de la radio pública.

“Pensé el libro como un recorrido, que la voz atravesara, cruzara los pantanos y los alambrados (…) Haber vivido las maneras en la que yo viví el campo, en una primera instancia en la infancia, después a mis 18 en un un campo muy hostil, y después saliendo aun con abrojos de ahí, siempre hay partes de una que se quedan, que las arrastrás con la lengua. También está la poesía para salvarnos de esos animales que nos van quedando en el pellejo”, dijo Belén Zavallo, quien también se refirió a las fronteras entre la poesía y la narrativa que en su obra se fusionan. “Creo que Anne Carson decía que si la prosa es una casa, la poesía es un hombre en llamas que la atraviesa. Se da natural en mi escritura la aparición de los dos formatos”, dijo Zavallo.