El poeta nacido en Quimilí, Santiago del Estero, visitó a Oscar Gómez Castañón.
Anotado con el nombre de Adolfo Marino, dijo que el primer se lo pusieron porque “era muy común, un nombre campesino”, pero que Marino, surge por decisión de su padre.
“Nací un día de mucha lluvia en el campo y por el agua no se pudo salir”, recordó Bebe e indicó que por eso, su padre dijo que “iba a ser un marinero en tierra” y así eligió el nombre Marino.
Habló con el Cholo de la “Santiagueñidad” y sostuvo que “debe ser una religión”, con su música, sus comidas, su poesía y sus coplas.
Recordó su llegada a Buenos Aires y su contacto con el resto de los santiagueños que ya se encontraban aquí, y aseguró que fue Jacinto Piedra quien lo impulsó a escribir canciones.
Además, se refirió a Santiago del Estero, donde “las carencias se suplen con la música” y afirmó que “de la aspereza del paisaje nace la suavidad de la copla y de la poesía”.
