Natalia Voragini, docente y trabajadora Social en General Pico, consideró que la demanda actual respecto a la Educación Sexual Integral (ESI) tiene que ver con “la información reproductiva” y en las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS).
“La demanda está puesta en la información reproductiva y en las ETS. En cómo doy y transmito información y en cómo empodero a esos jóvenes para recurran a un método anticonceptivo o a un centro de Salud y cómo rompo las barreras”, explicó.
"La deuda pendiente -analizó luego- es tener una formación de calidad porque en Educación nos está faltando eso para saber qué ofrecer a los y las docentes y a jóvenes. Además, poder llegar con la ESI a todas las instituciones formales y no formales".