Vélez Sarsfield FUTBOL ARGENTINO

Yo, Mauro

Por Rodrigo Ruíz - @RodrigoRuiz1976

Sin dudas que la salida de Mauro Zarate es un gran dolor de cabeza para Vélez.

En lo futbolístico veremos como Gabriel Heinze suple su ausencia. Aquí vale recordar que en los inicios la relación técnico/jugador no era la mejor ya que en algunos partidos fue al banco y en otros salió de la cancha de mala manera. Luego Zárate se preocupó por poner energías y sumar desde adentro de la cancha con su juego y goles y afuera del terreno a la hora de declarar.

Sabiendo que su contrato terminaba y el club debía comprar su pase al Watford inglés, apareció un invitado inesperado. Boca Juniors. Y su deseo de contratar al jugador. El Mundial en juego y el parate, dilataron la situación hasta el comienzo de la pretemprada. Las miradas más que nunca se posaron en el jugador, que, preso de sus palabras (“en Argentina no voy a jugar en otro club que no sea Vélez”) debía tomar una decisión. Y más, teniendo en cuenta el ya real interés de Boca por contratar al futbolista.

Inesperadamente y con un desenlace poco feliz para el club de Liniers, Mauro tomó la decisión de finalizar el vínculo. Mediante una carta pidió disculpas, retiró sus cosas de la Villa Olímpica y se despidió de todos. En un lugar que lo vio crecer, su magia dentro de la cancha y su individualismo que nunca nadie pudo corregir. Es que desde pibe, el menor de la dinastía fue distinto. El mejor de la categoría 87 y con una gran personalidad. La misma que a pesar de su apellido, lo llevó rápidamente a primera división y a una excursión por el mundo rodeado de millones de dólares siendo muy pibe.

Su vuelta trajo ilusión y esperanza en el momento por el cual pasaba la institución. Hoy le toca irse por su propia decisión, la misma que tomaba en la cancha para clavarla en un ángulo o hacer una de más. La misma que le clavó una daga a los hinchas que se enamoraron de él.