SOLIDARIDAD ENTRE RÍOS

Un grupo de jóvenes reparte comida caliente a personas en situación de calle

Generalmente uno asocia la juventud con energía, fuerzas, ganas, entusiasmo y a veces también se lo asocia con cuestiones ‘poco felices’. Pero si a la palabra ‘juventud’ la relacionamos con la noche, directamente nos remitimos a fiestas, a veces a ‘descontroles’, también a paseos, entre otras cosas que hacen al entretenimiento y diversión.

En este caso, debemos hablar de los que ‘menos se ven’; de los jóvenes que eligen la noche para salir, pero con algunos termos de café, algunas bolsas de facturas y pan; para buscar a las personas que duermen en las calles de Concepción del Uruguay y acercarles un poco de amor a través del buen gesto.

‘Juanma’ Lucero, tiene 21 años, y una sorprendente predisposición al servicio voluntario. Con la juventud que lo acompaña, con su inquietantes ganas de poder ayudar a las personas, pensó que podía cambiar de a poco la situación de quienes sufren necesidades, a través del simple hecho de poder brindarles durante el frío a los que menos tienen un buen café calentito, algo para alimentarse, y sobre todo, un poco de compañía.

En una entrevista, Juanma comenzó contando sobre su vocación de servicio: “Es un anhelo que tengo desde chico ya. Siempre quise tener una fundación para ayudar a la gente que necesita, o algo para poder ayudar”.
“Hace un tiempo atrás estaba ayudando en un comedor con las cosas que necesitaban en cuanto a ropa. Entonces recolectaba la ropa, la clasificaba y se la repartía a las familias”, agregó.

En ese marco, con la consigna puesta siempre en pensar en el otro, o poder colaborar con quien no la está pasando bien, continuó contando cómo fue que se le ocurrió esta salida ‘poco particular’ de nohe con sus amigos.

“La semana pasada, que hacía mucho frío me puse a pensar: uno por ahí está calentito dentro de su casa, con su familia, pero hay quienes están afuera, y ¿cómo hacen? Muchas veces no tienen alimentos, ni siquiera abrigos o frazadas. Entonces después se me ocurrió hacer café en termos y juntar algunas facturas y unos panes y salir a repartir”.

“Y bueno, amigos míos y conocidos aportaron su grano de arena por así decirlo, y salimos con la primera tanda. Yo les comenté a mis amigos y salimos a comprar entre todos el café, facturas, pan y eso, y sumando donaciones”, aclaró. Sobre el sentimiento que le produjo salir a ese encuentro con los que menos tienen, Juanma aseguró: “La verdad que por un lado uno se pone contento, porque al ver esas personas que reciben ese amor por así decirlo, ver la alegría ajena uno se pone muy contento, y la gente estaba muy agradecida”. “Y dicen que son muy pocos los que van a ayudarlos, porque la mayoría de las personas los miran distinto, con soberbia, o hay otros que hacen la vista gorda y no piensan que hay gente en la calle, o no quieren verlo”, añadió.

“El martes pasado cuando fuimos había entre seis y siete personas, y anoche – por el viernes- hicimos guiso de arroz. Entre amigos juntamos lo que es verduras, arroz, pure de tomates. Un vecino mío que tiene un flete que se ofreció a ayudarnos, nos llevó con las ollas y todo”, destacó Juanma.

Sobre la cantidad de comensales, Juanma acotó que el viernes fueron “muchos más, porque a la tarde pasamos a avisarles y a pedirles que todos estuvieran en un mismo lugar para poder llevarles el guiso, y cuando llegamos había un montón de gente, estaban esperándonos, re contentos todos”.

Cara a cara con el frío

Entre las anécdotas Juanma relató: “Había un viejito de más de 60 años, pero que sólo pedía un abrigo, alguna frazada y nada más. No quería comida, sólo abrigo. Entonces nosotros queremos empezar a ayudar cada vez más en lo que se pueda”. “Mi idea es que el que lo sienta de corazón, y se quiera sumar, que realmente lo haga, porque es verdaderamente lindo cuando se hace de corazón, no por interés”. Para acercar las colaboraciones se puede llamar al celular de Juanma, 15581969, sino contactarse vía Facebook: Juanma Lucero. “Lo que más necesitan son alimentos y abrigos. Y quizás bandejas descartables para servir”, concluyó.