La jefa de la Zona Sanitaria IV a la que corresponde San Martín de los Andes, Fernanda Hadad, aclaró las características que tienen las llamadas culebras ratoneras, similares a las que que recientemente fueron vistas en la ciudad de Junín de los Andes.
Señaló que “es muy infrecuente que este tipo de culebras muerda a las personas”. Destacó que “si bien pueden inocular veneno a sus presas, tienen los dientes ponzoñosos ubicados muy atrás en la boca, es decir, pueden inocular veneno a presas ya introducidas en la cavidad bucal o bien tienen que pasar un rato prolongado mordiendo para que los dientes traseros inoculen veneno”.
Explicó que consultó con especialistas del Centro de Ecología Aplicada de Neuquén (CEAN), quienes informaron que en nuestra provincia habitan aproximadamente 15 ofidios nativos, entre ellas una culebra conocida como culebra de cola corta que habita bosques húmedos.
Describió que “esta culebra (no serpiente) es de las más comunes y típicas en ecosistemas esteparios y es precisamente la que se ha observado. Es ágil y agresiva solo si es molestada y se esconde bajo piedras o troncos”.
La especialista explicó que “son distintas a la yarará o coral que directamente apenas muerden envenenan a la víctima puesto que poseen dientes en la parte delantera del maxilar” y que “se alimentan de pichones de aves, anfibios y ratones”.
Hadad también se refirió a otras especies de la región, como alacranes (aclaró que en nuestra zona las mordeduras no son venenosas) y arañas (algunas como la llamada araña de ropero y la viuda negra suelen tener efectos para la salud de quienes sufren picaduras).
La especialista también pidió reforzar las prevenciones para evitar el virus del ratón colilargo, conocido en nuestra región como el hantavirus.