FLORENCIA IBÁÑEZ TIERRA ADENTRO

"Amaba la radio, pero no se me había ocurrido que podía ser un trabajo"

Cuando en la adolescencia visité una radio tuve una revelación que me hizo correr frío por la espalda. Era Radio Nacional y en sus estudios de madera volví a sentir en mi cuerpo aquella sensación de estar en “la pieza del fondo” y supe que ese era mi lugar en el mundo, mi parte luminosa, donde nada malo iba a pasarme. La radio me da alegría, consuelo, la compañía de los oyentes, un lugar donde contar lo que aprendí y que a alguien le interese. La radio es el perfecto aquí y ahora donde desaparece todo dolor, y es curativa.

Eso representa la radio para Florencia Ibáñez, locutora y conductora de radio, y así lo cuenta en el libro "Un siglo de radio, cien años de voces", la recopilación realizada por Argentores.

En diálogo con la radio pública, la periodista recuerda la casa de su infancia y a su padre, y cuenta cómo fue su primer contacto con la radio, cuando Nacional estaba Ayacucho y Las Heras.

florencia-ibanez.jpg – SUR DIGITAL